SUBZONA I
“Las temperaturas son extremas y los cultivos están sufriendo. Con este escenario, los potenciales bajarán”, adviertían los ingenieros de Carlos Pellegrini tras registros de máximas que superaron los 40°C. El que se lleva la peor parte es el cultivo de soja de segunda y luego el de primera, siendo el maíz temprano el que menos lo padece ya que está terminando el ciclo. Si bien las lluvias acompañaron bastante bien el desarrollo de la soja de primera, las altas temperaturas atrasaron la formación de nuevas flores, bajando el potencial del mismo. “No hay lotes perdidos en la zona y toda lluvia en esta época es más que necesaria para retomar el normal desarrollo”, señalan. En cuanto a la soja de segunda, el 70% está iniciando la fructificación (R3) y el resto en floración (R2). No hay lotes perdidos, pero sí afectados por temperaturas elevadas. EL cultivo aun está a tiempo de retomar su desarrollo con lluvias en esta semana. En maíz temprano se espera un rinde de 100 qq/ha.
En El Trébol el cultivo más complicado por la falta de agua es la soja de primera, ya que está atravesando su periodo crítico. Sin embargo, los ingenieros señalan que si llueve esta semana el cultivo puede recuperarse. “Todo depende de cuándo llegan las lluvias. Se necesitan unos 40 mm para frenar el deterioro de la oleaginosa. Aun no se reportan perdidas de lotes. La soja de segunda está en floración. El 60% de los lotes está en buenas condiciones y el resto, regular. En cuanto al maíz temprano, se espera un rinde de 100 qq/ha.
SUBZONA II
La soja de segunda es el cultivo más castigado por al falta de agua en Bigand. “No se habla de lotes pedidos, pero sí de lotes que han perdido plantas y van a quedar con una densidad menor. Esto se traducirá en reducción de rendimiento”, comentan los ingenieros. La mayoría de la soja de primera está fructificando (entre R3 y R4). En la zona la pérdida de rinde es baja. Las lluvias de esta semana mejorarán las perspectivas productivas de ambos cultivos, siempre que se superen los 40 mm. La cosecha de maíz temprano comenzaría en 20 dias. Se espera un rendimiento promedio de 90 qq/ha, con mínimos de 80 qq/ha y máximos de 110 qq/ha. En cuanto al maíz tardío, son muy pocos los lotes sembrados y se consideran que fueron muy afectados por estos días de fuertes calores y falta de humedad en el suelo. Las lluvias de estos días llegan tarde para este cultivo.
En Bombal, solo el maíz tardío y el de segunda están complicados por la falta de agua. “Algunos lotes zafaron, pero no van a alcanzar el rendimiento esperado. En otros, estamos esperando la reacción alas lluvias. Pero en lotes de baja calidad, están casi perdidos”. El resto de los cultivos está en muy buenas condiciones. “Esta zona ha sido muy beneficiada por las lluvias. Hoy, martes estuvo lloviendo. En la mañana se acumularon unos 16 mm (más 60 mm del miércoles)”, señalan los técnicos. La soja de primera están alcanzando una altura cercana al metro, con buen número de chauchas. La soja de segunda esta en excelente estado. En maiz temprano se esperan 100 qq/ha.
SUBZONA III
“Por fín está lloviendo”, dicen los técnicos de San Pedro y alrededores. “Van 2 mm en San Pedro y en Arrecifes un poco más, pero sigue lloviendo (80 mm medidos en Baradero el 5/2)”, comentaban en la mañana del martes 4. Sin embargo, advierten que la lluvia “llega un poco tarde, pero bienvenida”. La soja de segunda es el cultivo más comprometido. Los lotes muestran un crecimiento muy limitado debido a la falta de humedad, lo que pone en duda su capacidad de recuperación incluso con las lluvias recientes. En cuanto a la soja de primera, el estado general es bueno, aunque el rinde ya está resentido por el déficit hídrico. El maíz de primera, en tanto, se encuentra en estado regular. “Los que están mejor son los sembrados en septiembre, tuvieron mejores condiciones y podrían alcanzar máximos de 80 qq/ha en algunos cuadros”, explican los técnicos. En contraste, los lotes sembrados más tarde muestran espigas pequeñas y mal granadas, lo que reduce considerablemente las expectativas de rinde, ubicándose en torno a los 30 qq/ha.
“Se pueden diferenciar dos grandes zonas. Hacia el sur de Wheelright, lo que comprende Sarasa, Carabelas y el sur de Colón, Rojas y Ferré dónde el panorama es desolador”, dicen los técnicos y agregan, “el 50% de la soja de segunda no va a rendir más de 15 qq/ha, incluso hay lotes totalmente perdidos. En algunos casos, se resembraron lotes hasta el 20 de enero, pero las plantas no superaron los 2 o 3 cm de altura y terminaron secándose por el calor extremo y la falta de lluvias. Los lotes que aún están en pie en su mayoría no pasan la altura de la paja del trigo”, describen. Las sojas de primera tampoco escapan al impacto del estrés hídrico. Se observan pérdidas de hojas en el tercio inferior y aborto de flores y chauchas, lo que limitará los rendimientos. “En el mejor de los casos, los lotes van a dar entre 25 y 30 qq/ha“, estiman los técnicos. Para los maíces tempranos, la situación es aún más preocupante. Aquellos sembrados en las primeras fechas, alrededor del 20 de septiembre, podrían rendir entre 50 y 60 qq/ha, pero los sembrados más tarde apenas alcanzarán los 30 qq/ha. “El grano es como el de un pisingallo, todo marlo”, lamentan los asesores. En contraste, la situación mejora hacia el norte de Wheelwright, en localidades como Firmat, Elortondo y Labordeboy. Aquí las lluvias fueron más generosas y esto se refleja en el estado de los cultivos. Aunque en soja también se observan pérdidas de chauchas y flores por las altas temperaturas, los lotes mantienen un buen estado general. En cuanto al maíz temprano, los rendimientos estimados no bajan de los 100 qq/ha, lo que marca una diferencia significativa respecto a la zona más afectada por la sequía.
SUBZONA IV
En la zona de Junín y sus alrededores (Rojas, Los Toldos, Chacabuco y Lincoln), la situación es heterogénea, aunque todos los cultivos sienten el impacto de la falta de agua y las altas temperaturas. “Afortunadamente, hoy (martes 4) llovieron en promedio 30 mm en la zona”, lo que trajo algo de alivio. La soja de segunda es el cultivo más comprometido. “Si no llovía hoy, se perdían”, advierten los asesores. “Con esta lluvia, los lotes más favorecidos podrían alcanzar, en el mejor de los casos, los 15 qq/ha, muy por debajo de los 30 qq/ha que se obtienen en un año normal. El estado del cultivo está directamente relacionado con el rendimiento que tuvo el trigo antecesor: puede rendir un poco mejor donde el trigo rindió menos y viceversa”, explican. Hacia Lincoln, donde los lotes son más desparejos, entre el 20% y el 30% de la soja de segunda está completamente perdida debido a la muerte de plántulas en los sectores de lotes de inferior calidad. En cuanto a la soja de primera, las perspectivas son mejores, con rindes estimados entre 35 y 40 qq/ha en los mejores casos. “Estas lluvias vienen bien, pero tiene que seguir lloviendo“, remarcan los técnicos. “La clave para sostener el rendimiento estará en las precipitaciones de febrero, que serán determinantes”. Para los maíces tempranos, el rendimiento ya está prácticamente definido y se ubicará entre 60 y 95 qq/ha: “los mejores rindes están hacia el lado de Chacabuco. Todo depende de cómo se dieron las lluvias”, comentan los especialistas.
SUBZONA V
La situación de los cultivos en Marcos Juárez es crítica debido a la falta de lluvias y las altas temperaturas de los últimos días. La soja es la más afectada, con pérdidas de rinde irreversibles en la mayoría de los lotes. “En la zona no tenemos pérdida de lotes aún, pero sí muchos con rodeos muy afectados, y la gran mayoría de los cuadros presentan pérdidas de rinde que no se van a poder recomponer. La lluvia pronosticada para el miércoles (5) es definitoria”, advierten los técnicos zonales. En soja de primera, la merma estimada es del 25 %, y aunque no hay lotes perdidos, un 10 % podría rendir menos de 20 qq/ha si no llegan lluvias pronto. La soja de segunda también enfrenta un panorama delicado: sin pérdidas totales hasta el momento, pero con el 80 % de los lotes en condición de regular a mala y con una necesidad urgente de al menos 40 mm de agua para frenar el deterioro. En cuanto al maíz, la cosecha del temprano comenzará a fines de febrero con un rendimiento promedio esperado de 85 qq/ha. El maíz tardío, en plena floración, atraviesa un fuerte estrés hídrico y térmico, lo que deja muchas incertidumbres sobre su futuro productivo.
Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo
El lunes 10 regresan las lluvias a la región
El periodo comprendido entre el jueves 6 y el miércoles 12 de febrero comienza con buenas condiciones meteorológicas que se mantendrán hasta la tarde del lunes 10, cuando se espera un aumento de la inestabilidad favoreciendo la ocurrencia de precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas aisladas con mejoramientos temporarios. La probabilidad de lluvias generalizadas, principalmente en el centro/este de la zona GEA, aumenta a partir del martes 11, pero las condiciones meteorológicas mejorarán rápidamente durante la mañana del miércoles 12.
Las temperaturas comienzan con un significativo descenso respecto de los valores previos, aunque tienden a ascender nuevamente alcanzando máximas de 38 a 40°C entre el domingo 9 y el lunes 10. Posteriormente, debido al pasaje de un sistema frontal frío, los registros máximos descenderán significativamente.
Las temperaturas mínimas tendrán un comportamiento similar a las máximas, descendiendo el jueves 5 y ascendiendo progresivamente con el correr de los días hasta llegar a los 18 a 21°C el lunes 10. Por la irrupción de la masa de aire más fría las marcas mínimas volverán a descender, principalmente en el centro/sur de la zona GEA, a valores entre 14 y 16°C y levemente superiores en el sector norte.
Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo
Lluvias de entre 50 a 90 mm en el centro y sur de la región núcleo
La semana comprendida entre el jueves 30 de enero y el miércoles 5 de febrero se registraron acumulados entre 50 y 70 mm, con máximos puntuales cercanos a los 80/90 mm en el centro y sur de la región núcleo.
El mayor acumulado en el periodo fue de 99 mm, y se midió en la localidad de Laboulaye, Córdoba.
Las temperaturas máximas fueron muy elevadas y oscilaron entre los 35 y 41°C. Los registros más altos se ubicaron en el centro/este de la zona GEA. El valor máximo extremo, 40,9°C, se midió en las localidades de Godeken y Maggiolo, ambas en Santa Fe. Las temperaturas mínimas rondaron los 15 a 19°C en forma generalizada, encontrándose los valores más bajos en el sudeste y los más altos en el noroeste de la zona GEA. El valor mínimo extremo del periodo, 14,4°C, se midió en la localidad de Monte Buey, Córdoba.
Con este panorama las reservas de agua en el suelo mejoraron bastante respecto a la semana pasada. El área de sequía se redujo y ahora predominan las condiciones escasas, pero en el oeste y sudoeste de la región las reservas de humedad van de regulares a adecuadas.
Con las actuales condiciones, en los próximos quince días, se requieren entre 80 y 100 mm en forma generalizada, con zonas puntuales donde el agua necesaria alcanza los 120 a 130 mm para llegar a las condiciones de humedad óptimas. Mientras que en el sudoeste y noroeste los montos disminuyen a valores entre 40 y 60 mm.
Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco
Segunda semana de febrero: probabilidad de más lluvias y de amplia cobertura
El arranque de febrero presentó todas las variantes posibles, incluida ola de calor y el retorno de precipitaciones significativas y generalizadas que cubrieron gran parte de la franja central del país, pero sin extender el preciado alivio al NOA y NEA.
La transición mensual se produjo con un ascenso paulatino de las temperaturas que, por el ingreso de aire tropical muy cálido y seco desde el norte del país, alcanzaron sus valores máximos extremos el día lunes 3. Dentro de la zona núcleo los termómetros, en líneas generales, rondaron los 40ºC con mínimas también muy elevadas provocando la segunda ola de calor del 2025.
A partir del día martes un centro de alta presión, ubicado al sur de la costa de Buenos Aires, potenció el ingreso de humedad sobre el norte bonaerense y la franja sur de la zona núcleo. Este escenario fue muy bien capitalizada por el ingreso de un frente frío provocando lluvias y tormentas de importante volumen y bastante generalizadas, con acumulados en el rango de 50 a 120 milímetros.
Cabe destacar que esta vez, a diferencia de lo ocurrido en enero, aun con la variabilidad normal que tienen los acumulados en función de la distribución geográfica, el disponer de humedad atmosférica más homogénea permitió que las precipitaciones se generalizaran sin presentar un comportamiento tan errático y extremadamente irregular como para saltear, sin lluvia, localidades cercanas dentro de las regiones cubiertas por el evento.
Las reservas de agua muestran el alivio proporcionado por el buen desempeño de las precipitaciones en los inicios de febrero, pero la mejora solo tuvo beneficios concretos sobre parte de la franja central de la región pampeana. Por el momento el escenario de altas temperaturas y escasez de agua se mantiene desde el centro hacia el norte del país y los pronósticos no prevén cambios relevantes para ese territorio en el corto plazo.
El caso de la zona núcleo es diferente, los modelos muestran el avance de un nuevo sistema frontal frío iniciando la segunda semana del mes. Luego de las abundantes lluvias recibidas, si se dan las condiciones propicias, es probable que el frente encuentre a su paso una masa de aire cálido con un importante contenido de humedad, que potencialmente podría favorecer el desarrollo de lluvias con un mejor desempeño y más amplia cobertura.