Operaba mediante celulares ilegales, impartiendo órdenes para extorsionar comerciantes, lanzar amenazas a funcionarios públicos y coordinar ataques armados
El narcotraficante Matías Ernesto “Bicho” Álvarez, oriundo de Venado Tuerto, fue condenado a prisión perpetua por el Tribunal Oral Federal N°3 de Rosario, tras ser hallado culpable de ordenar extorsiones y el asesinato de Érica Ávalos, ejecutada con 17 disparos en Firmat en diciembre de 2022. Aunque estaba detenido en la Unidad Penal N°6 de Rawson, Chubut, la justicia probó que dirigía desde prisión una poderosa red criminal con alrededor de 50 miembros.
Álvarez operaba mediante celulares ilegales, impartiendo órdenes para extorsionar comerciantes, lanzar amenazas a funcionarios públicos y coordinar ataques armados. Su estructura criminal incluía distribuidores de drogas, sicarios y lavadores de dinero, y su poder interno lo llevó incluso a ordenar un ataque contra su expareja para mantener el control.
El juicio evidenció que usaba la violencia y el miedo como herramientas de dominio, incluso realizando videollamadas intimidatorias desde la cárcel. El crimen de Ávalos, motivado por conflictos internos en su organización, fue la culminación de una serie de hechos que expusieron el funcionamiento mafioso de su red, a pesar de estar tras las rejas. La sentencia destaca su rol como autor intelectual del homicidio y líder de una organización criminal activa desde el encierro.