Nueve jugadores se anotaron en el registro de oferentes interesados en quedarse con Vicentin. Molinos Agro, Commodities SA, Bioenergías Agropecuarias, Barbero Cereales, Yabitel SA, Bunge, Viterra, ACA y la Unión Agrícola de Avellaneda se inscribieron en el registro que había dispuesto el juez civil y comercial de Reconquista, Fabián Lorenzini, al abrir el proceso de cram down.
Finalizada esta etapa, llegará el momento en donde los interesados deberán presentar sus propuestas para rescatar y hacerse cargo de la agroexportadora, y de ese modo, evitar la quiebra.
A esta instancia se llegó luego de un largo proceso que arrancó con el default de fines de 2019 y culminó con el rechazo judicial de la propuesta concursal que impulsaron los accionistas de la cerealera.
Proceso con urgencias
Al abrir el proceso de rescate, Lorenzini determinó que la inscripción previa es obligatoria para cualquier firma que pretenda participar de la etapa decisiva, cuando se pongan sobre la mesa las ofertas concretas para sanear pasivos y seducir a los acreedores.
Según el fallo del Juzgado Civil y Comercial de Reconquista a cargo de Lorenzini, la inscripción no requería garantía dineraria en esta instancia pero sí será excluyente para participar del proceso de concurrencia definitivo. El documento emitido por el juez destaca la urgencia por la continuidad productiva de la firma: “La crítica situación de caja, la proximidad del vencimiento de los contratos de fazón y los plazos de cosecha y siembra hacen necesario reencauzar el salvataje sin demoras”.
La resolución señala que tras la inscripción se fijarán nuevas fechas para audiencias informativas, presentación de valuaciones, plazos de observaciones y obtención de mayorías para una posible propuesta concordataria.
Si bien cualquier empresa puede competir por una porción de los activos de Vicentin, el proceso prioriza aquellas propuestas que apunten a adquirir la totalidad del paquete, con el objetivo de compensar de forma más eficiente a los acreedores que verificaron créditos en el concurso. Si ninguna de las ofertas alcanza las mayorías legales, el expediente entrará en liquidación.
Los interesados para rescatar a Vicentin
Molinos Agro, controlada por el grupo Pérez Companc, que durante años compartió el puerto de San Lorenzo con Vicentin y fue socio en la creación de Renova, fue uno de los anotados. También Commodities, ligado a la familia Grassi, que es el principal acreedor comercial no cooperativo del concurso. Es el grupo que, desde el inicio, promovió la salida del cram down.
Además, entraron en la carrera otras empresas más chicas como Bioenergías, que tiene base en Villa Ocampo y la azucarera tucumana Yabitel, quienes estarían interesadas fundamentalmente en el llamado Nodo Norte. El quinto interesado es el acopio cordobés Barbero Cereales, que estaría en carrera de la mano de AGD.
Bunge y ACA -el principal acreedor comercial de Vicentín- son las firmas que en la propuesta concursal presentada por la antigua conducción de Vicentin figuraban como “socios estratégicos”, interesados en quedarse con las principales plantas. Bunge junto a Viterra están interesadas en la participación accionaria que Vicentin tiene en Renova, que es controlada justamente por Viterra.
La Unión Agrícola de Avellaneda es acreedora y un fuerte actor del negocio que contribuyó a mantener activas las plantas de Vicentín enviándoles granos para procesar y exportar.
La meta del juez Lorenzini es cerrar el proceso antes de fin de año y así poner punto final a uno de los concursos más prolongados y polémicos del sector.