Para el economista, Uruguay se convirtió en una moda para el gran capital. Era una guarida fiscal en la década del 80, cuando se constituyeron las zonas francas donde no pagan impuestos. Después, evolucionó por presiones internacionales y levantó algunas regulaciones. Lo que pasa es que quedaron resabios de ese formato de guarida fiscal, describió.
Álvaro Arellano / Franco Trovato
El doctor en Economía Gustavo García Zanotti advirtió que desde hace décadas grandes empresas con operación en suelo argentino trasladan artificialmente sus ganancias a guaridas fiscales mediante complejas maniobras de planificación tributaria agresiva. A través de firmas fantasma, sin infraestructura ni actividad real (radicadas en paraísos fiscales) canalizan operaciones intra firma para evitar tributar donde realmente generan valor, como ocurre en Argentina. A esto se suma un factor menos visible pero igualmente dañino: los beneficios fiscales legales otorgados por los propios Estados. En ese sentido, Mercado Libre se convierte en un caso testigo: solo en el primer semestre de 2025 recibió el equivalente a 51 millones de dólares en concepto de beneficios fiscales, amparado en el régimen de la Ley de Economía del Conocimiento.
«Son más de 100 millones de dólares anuales que deja de tributar», señaló Zanotti. En paralelo, sectores como el oleaginoso subfacturan exportaciones para evadir retenciones e impuestos. Uruguay, por su parte, resurge como refugio fiscal: aunque dejó atrás su imagen más cruda de guarida en los años 80, conserva resabios como las zonas francas y regímenes especiales que permiten a tradings pagar apenas el 0,75% del impuesto a la renta. “Hoy es una moda entre grandes capitales”, afirmó el economista en el stream de Economía de El Ciudadano.
«Desde hace unas cuantas décadas grandes empresas radican firmas en guaridas fiscales. A partir de ahí se posibilita el abuso fiscal, evitan pagar impuestos desarrollando operaciones intra firmas entre empresas que generan valor y ganancias, donde hay un proceso productivo con empresas radicadas en guaridas, empresas tipo cáscaras. Son empresas fantasmas, offhsore, que están vacías por dentro, no tienen infraestructura», detalló el entrevistado.
A partir de las transacciones, las ganancias generadas en Argentina se trasladan contablemente a esas empresas offshore que no pagan impuestos. Lo que termina ocurriendo es que globalmente pagan menos impuestos de lo que deberían, como es en el caso de Argentina.
Pero a estas maniobras de fuga y evasión se suma una tercera cuestión, que tiene que ver con beneficios fiscales otorgados por los Estados. En Argentina las empresas vinculadas al desarrollo de software pagan menos de impuesto a las ganancias y hacen menos aportes sociales a partir de la Ley de Economía del Conocimiento.
El caso más simbólico es el de Mercado Libre, que blanquea su balance año a años. «Este primer semestre de 2025 reconoció que obtuvo 51 millones de dólares de beneficio fiscal el primer semestre. Generalmente Mercado Libre obtiene 100 millones de dólares anuales de beneficio fiscal por parte del gobierno. Ese monto deja de tributar en Argentina», especificó Zanotti.
Por su parte, en el sector oleaginoso se da una maniobra denominada subfacturación de importaciones, donde facturan menos de lo que deberían y de esa forma pagan menos retenciones, menos impuestos a las ganancias.
Por qué las empresas recurren a Uruguay
Para el economista, Uruguay se convirtió en una moda para el gran capital. Era una guarida fiscal en la década del 80, cuando se constituyeron las zonas francas donde no pagan impuestos. Después, evolucionó por presiones internacionales y levantó algunas regulaciones. Lo que pasa es que quedaron resabios de ese formato de guarida fiscal, describió.
«Hoy existe ese gris, con empresas que utilizan intensivamente ese territorio a través de tradings, se mueven sumas multimillonarios. Hay dos regímenes especiales: uno que es ese el de zona franja y otro para las empresas trading. Con una resolución a través de la cual pagan solo el 0,75% del impuesto a la renta. Con esta moda muchas empresas apelan a esto», sintetizó.