El amor incondicional salvó una vida en Los Toldos, Salta. La pequeña de tres años, perdida en una quebrada empinada, fue protegida y encontrada gracias a los insistentes ladridos de su perrita Ashley.
La noche del pasado martes se tiñó de angustia en el remoto paraje El Arazay, en Los Toldos, al norte de Salta.
Sin embargo, lo que pudo haber sido una tragedia se convirtió en una conmovedora historia de lealtad y supervivencia gracias a un héroe inesperado: una perrita llamada Ashley.
Todo comenzó alrededor de las 5.40 de la tarde, justo cuando una intensa lluvia se desató sobre la zona.
La niña, de apenas tres años de edad, jugaba cerca de su casa cuando de pronto desapareció. Su abuelo, Celso Cañizares, relató la desesperación que sintió la familia al notar su ausencia.
«Estábamos tranquilos en casa… a partir de las 5.40 se largó una lluvia. Nosotros en ese momento ya le comenzamos a echar de menos, comenzamos a buscarla, buscarla, y no la encontrábamos», contó el abuelo.
Inmediatamente se movilizó toda la comunidad: vecinos, familiares, policías y guardaparques del Baritú se unieron a la búsqueda. No obstante, al caer la noche, la esperanza se desvanecía. «Ayudando a buscar, al final ya se hizo la noche, no la encontrábamos», relató.
El ladrido que cambió todo
La búsqueda se centró en una loma a casi dos kilómetros de la vivienda, una zona de quebrada muy empinada y de difícil acceso. Los rescatistas temían lo peor: que la pequeña hubiera sufrido algún accidente.
El hallazgo se produjo recién a las 8.40 de la noche, gracias a la astucia de dos jóvenes que subieron por una loma por casualidad. Fue allí cuando la perrita de la niña, Ashley, comenzó a ladrar de una forma peculiar.
«La perrita comenzó a ladrar, por eso fue que la encontraron. Y ladraba con un ladrido medio raro, porque mi hijo tampoco lo podía reconocer», explicó Celso Cañizares.
Al escuchar el ladrido inusual, los jóvenes gritaron el nombre de la niña. Aunque al principio no obtuvieron respuesta, tras un segundo grito, la pequeña respondió con una voz que, aunque apenas audible (ya que «no hablaba muy bien»), confirmó que estaba viva.
Una pequeña héroe mojada y abrazada
La escena del rescate fue conmovedora. Los hombres se abrieron paso por la inclinada loma, casi cayendo, y la encontraron en una quebrada.
«La encontraron así paradita, bien mojadita y con la perrita al lado. Ella como que estuviera abrazando a la perrita, sí, en la oscuridad», describió el abuelo con emoción.
La familia está convencida: la perrita, que se llama Ashley, fue la salvadora. Ella no solo ladró para guiar el rescate, sino que también cuidó a la niña de tres años durante horas bajo la lluvia, en la oscuridad de la noche, ofreciéndole protección y consuelo.
La niña, aunque descalza y mojada, se encuentra bien y fue atendida por médicos en la misma casa. «La perrita la salvó entonces… es la héroe de la familia, del pueblo», concluyó el abuelo.
Fuente: cadena3