La Fundación Cauce y el Foro Ecologista de Paraná presentaron una denuncia penal por contaminación en la cuenca del río Paraná. Piden que se investiguen los delitos de contaminación ambiental, inspecciones inmediatas en los parques industriales de Paraná y Crespo, identificación de las empresas responsables y revisión del accionar de los funcionarios encargados del control. La acción judicial se realizó tras la aparición de aguas rojizas en el arroyo Espinillo (Entre Ríos), afluente de arroyo Las Conchas, ambos tributarios del río Paraná.
El hecho se conoció el pasado 26 de octubre. El arroyo afectado se ubica al norte de Paraná, cerca de su toma de agua y es parte de un territorio vital para las comunidades del lugar. El gobierno entrerriano manifestó que «la coloración inusual en arroyo Espinillo podría responder a un fenómeno natural”. Sin embargo, realizó tareas de monitoreo del agua para evaluar la razón del fenómeno.
En 2022, se produjo una situación similar y la explicación oficial fue que los efluentes provenían de un frigorífico. En junio pasado, un estudio reveló la presencia de glifosato en sus sedimentos.
La presentación judicial se realizó este 28 de octubre, ante el fiscal federal Leandro Ardoy. Las organizaciones socioambientales piden que se investigue el posible incumplimiento de la la Ley 24.051 de Residuos Peligrosos, ante la posible descarga de efluentes industriales y cloacales sin tratamiento adecuado en la cuenca de los arroyos Espinillo, Crespo, Las Conchas y Las Tunas.
“El objetivo principal es detener la degradación ambiental, exigir medidas urgentes de control y remediación, y garantizar el resguardo del agua y la salud pública de las comunidades entrerrianas”, indicaron al medio Era Verde.
La Red Cuenca Las Conchas es un colectivo de vecinos, vecinas y organizaciones apartidarias que habitan y desarrollan emprendimientos sustentables en el territorio de la Cuenca Las Conchas. A través de un comunicado, señalaron que respaldan la presentación judicial.
«Sin perjuicio de ello vamos a analizar junto a nuestros abogados, nuevas acciones de tipo local que nos permitan a quienes habitamos la cuenca prevenir nuevos incidentes, identificar a los responsables y sobre todo monitorear y recomponer la calidad de nuestros arroyos, fuente de vida para las actividades productivas, recreativas y ecosistémicas que decidimos proteger activamente», señalaron.
Contaminación con glifosato en los sedimentos del arroyo
En junio pasado, durante el VIII Congreso de Salud Socioambiental realizado en Rosario, se presentó un estudio sobre el estado ambiental de la cuenca Las Conchas. Rafael Lajmanovich, doctor en Ciencias Naturales y docente de Ecotoxicología de la Universidad Nacional del Litoral, presentó un sobre los sedimentos de los arroyos Crespo, Espinillos, Las Tunas y Las Conchas.
En el arroyo Las Conchas encontró “el récord mundial de glifosato en sedimentos de una reserva natural de Sudamérica: 5.002 microgramos por kilo de sedimento”. Advirtió: “No existe, en Argentina ni en Sudamérica, un valor más alto en estudios publicados. Esto significa que en ese arroyo la vida es inviable”.
“Todos estos cursos de agua muestran un signo de colapso ecosistémico y este colapso viene ocurriendo desde hace muchísimo tiempo. Notamos que hay una total falta de gestión estatal. Si hay normas, nadie las cumple. Si hay multas, probablemente se paguen y se siga contaminando”, cuestionó.
Un espacio vital para las comunidades costeras
El arroyo Espinillo es uno de los principales cursos de agua que componen la cuenca del arroyo Las Conchas. Posee casi 50.000 hectáreas de captación de agua y una longitud máxima de 46 kilómetros, desde sus nacientes en cercanías a la ciudad de Crespo hasta su desembocadura en el arroyo Las Conchas, al norte de Paraná.
Sobre la traza exclusiva del arroyo Espinillo, existen dos campings con playa sobre el mismo, dos sectores con bungalows y al menos tres bajadas (en calzadas y bajo puentes). Allí la gente suele pescar y bañarse. Luego de su desembocadura sobre Las Conchas, hay varias playas en las que se disfruta del agua. Además, hay campos cercanos con tambos y actividades de cría (de equinos, caprinos y vacunos) que abrevan en el arroyo.
Estas cuencas corresponden a zonas que son de las primeras en la colonización regional, detallaron desde la Red Cuenca Las Conchas. Luego pasaron de ser ganaderas a un uso agrícola intensivo. “Esto resultó en una fuerte pérdida de biodiversidad y disminución en la posibilidad de gestión de la calidad de sus aguas, tanto como en la prevención de inundaciones y sequías frente a eventos climáticos extremos“, precisaron.
Destacaron, además, que el arroyo Espinillo fue sitio del primer acto de autonomía provincial. Allí, el 22 de febrero de 1814, las tropas entrerrianas vencieron a las del Directorio en defensa de la autonomía y la visión federal de la Liga de los Pueblos Libres.
La Red se organizó por las amenazas a ese ecosistema. Su objetivo es promover su cuidado, visibilizar los bienes naturales y las actividades sustentables que desarrollan y reclamar por el cumplimiento de sus derechos y los de la naturaleza.
Pedidos de información pública
Desde la Red Cuenca Las Conchas informaron que el pasado 12 de agosto hicieron un pedido de acceso a la información a la Secretaría de Ambiente de la Provincia de Entre Ríos. También solicitaron una audiencia al Ministro de Desarrollo Económico, Guillermo Bernaudo. Sobre la audiencia, no tuvieron respuestas.
En cuanto a la información solicitada, indicaron que resulta «recortada arbitrariamente e incompleta» en algunos puntos. Y que, en otros, hay «respuestas lavadas, de contenido genérico».
Desde la Red finalizan el comunicado con una interpelación al Estado: «¿No sería más fácil, eficiente y democrático, convocarnos para acordar algunos puntos y buscar soluciones conjuntas?».
