07/08/2025 13:40hs.
La agenda de agosto está llena en River. Son siete partidos confirmados (ya jugó el primero vs. San Martín de Tucumán) y podrían ser ocho si la AFA decide agregar el choque por Copa Argentina frente a Unión. Para afrontar esos compromisos, con una rotación que será inevitable, Marcelo Gallardo necesita de todas sus piezas y este jueves por la mañana recuperó a uno de los lesionados: Lautaro Rivero recibió el alta médica y automáticamente quedó a disposición para el clásico ante Independiente y lo que se viene tanto en el plano local como internacional.
El marcador central había sufrido una molestia muscular en el sóleo derecho en la previa del partido en el Kempes frente a Instituto y al regresar a Buenos Aires los estudios por imágenes arrojaron un pequeño desgarro.
19 días después, dentro del plazo de recuperación de tres semanas, superó la última prueba intensa de la semana, no sintió dolor en un músculo que puede llegar a demandar una recuperación compleja -desde permitirnos estar de pie y caminar por su composición de tejido de contracción lenta hasta ayudar a la circulación sanguínea- y está a la espera de poder tener su ansiado estreno en la Primera de River.
Repescado por el Muñeco para llevarlo al Mundial de Clubes luego de su gran primer semestre en Central Córdoba de Santiago del Estero (30 PJ), donde jugó la fase de grupos de la Copa Libertadores, Rivero es alternativa de Paulo Díaz como segundo marcador central zurdo, sobre todo teniendo en cuenta que Martínez Quarta (hoy lesionado) se mostró incómodo cuando le tocó ubicarse en esa posición al formar dupla con Pezzella.
El parate obligado le llegó en un momento inoportuno al defensor, que perdió terreno en la pelea por ser uno de los cinco cambios en la lista de buena fe de la Copa Libertadores para los octavos de final. Aunque finalmente fue Seba Boselli el elegido para reforzar la zaga, Lautaro, a sus 21 años, está muy bien considerado por Gallardo.
Además de formar parte del club de los jugadores con cláusulas de 100M de euros tras la extensión de su vínculo hasta 2028, desde las oficinas del Monumental declinaron una oferta del Anderlecht de Bélgica de 3,5M de euros.